12 de diciembre de 2001
Miércoles 8.00 p.m.
En el contexto de una grave crisis que afecta y se proyecta sobre todos los sectores sociales, económicos y financieros del país, el gobierno nacional ha intentado evitar la extracción intempestiva de fondos bancarios por parte de los ciudadanos y ha impuesto su restricción desde el 1/12/2001. La medida económica conocida popularmente como “corralito” ―que consiste en la retención de los ahorros y solo permite una extracción de $ 250 semanales― ha repercutido y afectado inmediatamente toda la cadena productiva. CAME (Coordinadora Nacional de Actividades Mercantiles) ha dispuesto para el día de hoy un apagón de una hora en los servicios públicos (luz, agua, teléfonos) y movilizaciones en cada una de las localidades. El CCIyR de Armstrong, adherido a CAME, es el encargado de concretar la consigna: sus miembros confirman un 70% de disminución en sus actividades en los últimos meses y una marcada incertidumbre ante la situación presente y futura. La respuesta a la convocatoria es masiva: comerciantes, industriales, productores y los distintos gremios de la ciudad, acompañan con el apagado de los servicios en sus respectivos locales y se congregan ante las instalaciones de la entidad; desde allí marchan por las calles del radio céntrico (a pie y en vehículos) hasta Municipalidad, Concejo y Bancos, donde se detienen y entregan en cada entidad un volante con sus reclamos, en un marco de cacerolazos y cánticos alusivos. La movilización del día de hoy ―bulliciosa, masiva y heterogénea― marca para Armstrong un punto de inflexión en su forma de manifestarse públicamente: en el futuro, la modalidad adoptada se replicará con asiduidad cada vez que el pueblo se sienta avasallado en sus derechos.